El cáncer de mama es la forma de cáncer que se diagnostica con mayor frecuencia y el que provoca mayor cantidad de muertes por cáncer en mujeres de la Argentina.

Las mamas

Cada mama tiene secciones llamadas lóbulos y cada uno de ellos tiene lobulillos más pequeños. Estos terminan en docenas de bulbos diminutos que pueden producir leche. Los lóbulos, lobulillos y bulbos están conectados por tubos delgados llamados conductos. Estos conductos llegan al pezón que está centrado en el área oscura de la piel llamada areola. Los espacios entre lobulillos y los conductos están llenos de grasa. No hay músculos en la mama; los músculos están debajo de cada mama y cubren las costillas. Cada seno tiene, además, vasos sanguíneos y vasos linfáticos, y estos últimos terminan en órganos pequeños llamados ganglios linfáticos. Hay racimos de ganglios linfáticos cerca de la mama, en la axila, arriba de la clavícula y en el pecho. Los ganglios linfáticos se encuentran en muchas otras partes del cuerpo.

¿Quiénes están en riesgo?

No se conocen las causas exactas del cáncer de mama. Sin embargo, los estudios muestran que el riesgo de cáncer aumenta conforme la mujer envejece. Es una enfermedad muy rara en mujeres menores de 35 años de edad. Las mujeres de 40 años y más están en mayor riesgo de desarrollar este tipo de cáncer.

Las investigaciones han demostrado que las siguientes condiciones aumentan las posibilidades de que las mujeres desarrollen cáncer de mama:

  • Historia personal de cáncer de mama. Las mujeres que ya tuvieron cáncer de mama enfrentan un mayor riesgo de desarrollar otro cáncer de mama.
  • Historia familiar. El riesgo de una mujer de desarrollar cáncer de mama aumenta si su madre, hermana, hija o dos o más parientes cercanas, como las primas, tuvieron cáncer de mama, sobre todo a una edad joven.
  • Ciertos cambios en los pechos. El haber tenido un diagnóstico de hiperplasia atípica o de carcinoma lobular in situ (Ver Terminología) puede aumentar el riesgo.
  • Alteraciones genéticas. Los cambios en ciertos genes (BRCA 1 y BRCA 2 y otros) aumentan el riesgo. Los médicos pueden sugerir formas de retrasar o de prevenir la aparición del cáncer en mujeres que tienen cambios en estos genes.

Otros factores relacionados con un riesgo mayor de contraer cáncer de mama son:

  • Estrógeno. Estudios sugieren que cuanto más estuvo expuesta una mujer al estrógeno, mayor probabilidad existe de que desarrolle cáncer. Sería el caso de mujeres que menstruaron tempranamente y que experimentaron menopausia tardía. También incluye a las que utilizaron dietilestilbestrol (DES), una forma de estrógeno sintético muy utilizada hace varias décadas.
  • La maternidad tardía (mujeres que tuvieron sus hijos después de los 30 años)
  • La densidad del seno, que dificulta la detección de tejidos anómalos.
  • La radioterapia anterior a los 30 años de edad.

La mayoría de las mujeres que desarrollan cáncer de mama no tienen alguno de estos factores, a excepción del envejecimiento. También es cierto que mujeres que tienen algunos de estos factores no desarrollan cáncer de mama. Se siguen investigando aún hoy las causas del cáncer para conocer los factores de riesgo y las formas de prevenirlo.

Diagnóstico

El primer paso para efectuar una detección precoz del cáncer de mama consiste en que las mujeres deben conocer cómo son sus propios senos.

Auto-examen de mamas

Debe llevarse a cabo en dos momentos y de la siguiente forma, según indicaciones del Instituto Alexander Fleming, Argentina:

1. Parada de frente al espejo, OBSERVE si hay cambios

  • Colocar las manos a los lados del cuerpo y mirar las mamas;
  • Con las manos sobre la cabeza, mire si hay cambios;
  • Con las manos en la cintura, apriete hacia abajo, inclínese hacia abajo y hacia delante. Mire si nota alguna diferencia.

2. Acostada, examínese al tacto cada mama, de la siguiente forma:

  • Acuéstese y ponga una toalla debajo del hombro derecho, levante el brazo derecho sobre la cabeza y con la mano izquierda…
  • Examínese la zona desde la axila hasta la línea baja del corpiño a través del pecho, hasta el esternón y, desde la clavícula hacia la axila, empleando la yema de los dedos medios de la mano izquierda. Arquee la mano y mueva los dedos en círculos del tamaño de una moneda de 10 centavos;
  • Emplee tres niveles de presión: suave, mediano y fuerte;
  • Examínese toda la zona pasando la mano de arriba hacia abajo.
  • Seguidamente, examínese la mama izquierda con la mano derecha siguiendo todos los pasos del ejemplo anterior, colocando esta vez, una toalla debajo del hombro izquierdo, y la mano izquierda sobre la cabeza.
  • Si encuentra protuberancias o cambios, comuníqueselo a su médico inmediatamente.

Para averiguar la causa de bultos, cambios en la mama (detectados en el auto-examen) o en imágenes que aparecen como anormales en una mamografía, el médico hará un examen físico detallado y preguntará la historia médica familiar y personal. Podrá hacer uno o varios de los siguientes exámenes:

  • Examen clínico.
  • Mamografía
  • Ecografía

Con base en estos exámenes puede solicitar más estudios, extraer líquido o tejido para hacer el diagnóstico. En este caso puede realizarse:

  • Una aspiración con aguja fina para extraer líquido del bulto y examen en laboratorio que es casi indolora.
  • Una biopsia con aguja con extracción de tejido del área sospechada en la mamografía. La muestra se envía a analizar por un patólogo.
  • Una biopsia quirúrgica. El patólogo examina el tejido bajo microscopio para verificar si tiene células cancerosas.

Preguntas que una mujer puede hacer a su médico ante la indicación de una biopsia:

  • ¿Qué tipo de biopsia me harán? ¿Por qué?
  • ¿Cuánto tiempo llevará? ¿Estaré despierta? ¿Dolerá?
  • ¿Cuándo tendré los resultados?
  • ¿Si tengo cáncer, quién hablará conmigo sobre el tratamiento? ¿Cuándo?

Si el diagnóstico es cáncer de mama, la mujer querrá hacer estas preguntas:

  • ¿Qué tipo de cáncer de mama tengo?
  • ¿Cuál fue el resultado de la prueba de receptores de hormonas? ¿Qué otras pruebas de laboratorio se hicieron en el tejido del tumor y cuáles fueron los resultados?
  • ¿Cómo ayudará esta información a decidir qué tipo de tratamiento o qué otras pruebas se recomiendan?

El médico puede derivar a la mujer a un especialista en cáncer -oncólogo- o ella pedir que le recomiende alguno. El tratamiento generalmente comienza unas semanas después del diagnóstico y habrá tiempo de consultar a otros médicos, pedir una segunda opinión, informarse y pensar las alternativas de tratamiento que están disponibles.

Los médicos rara vez pueden explicar por qué una mujer desarrolla un cáncer de mama y otra no. Sin embargo, queda claro que no aparece por causa de un golpe, una magulladura o por tocar el seno.

Consejos para mujeres operadas de mama a quienes se les hayan extraído ganglios:

Una de las complicaciones más molestas cuando se han extraído los ganglios de la axila, es la aparición del edema o inflamación del miembro superior. Para reducir los riesgos del linfedema se aconseja:

  • Use su brazo normalmente para realizar tareas cotidianas como bañarse, vestirse, peinarse, comer.
  • Puede planchar, lavar y tejer pero durante períodos breves.
  • Depílese la axila únicamente con afeitadora eléctrica.
  • Evite usar pulseras cerradas o anillos que opriman el brazo afectado.
  • Use guantes de goma en la cocina y/o en el jardín.
  • Use dedal para coser.
  • No cargue grandes pesos con el brazo afectado.
  • Evite tomar la presión, inyecciones, vacunas o extracciones de sangre en el brazo afectado.
  • No use tijeras para cortar las cutículas. Use corta cutículas.
  • Use repelente para evitar picaduras.
  • Use protector solar para evitar quemaduras.
  • Si se corta o quema el brazo afectado, lave la herida, desinféctela y cúbrala con gasa estéril.

En fin, si alguna parte de su brazo o axila se hincha, enrojece o calienta, recurra a su médico.

¿Cuáles son los tratamientos existentes para el cáncer de mama?

El tratamiento de cáncer de mama dependerá: del tipo y etapa de la enfermedad, de la edad de la paciente, si está en la menopausia y de su estado de salud general.

Existen tratamientos para todas las pacientes de este cáncer: Se emplean 4 con mayor frecuencia:

  • Cirugía: extracción del cáncer en una operación
  • Radioterapia: uso de dosis elevadas de rayos X para eliminar las células cancerosas y reducir el tumor
  • Quimioterapia: uso de fármacos para eliminar células cancerosas. Es un tratamiento sistémico, ya que el medicamento es distribuido por el torrente sanguíneo, por todo el cuerpo.
  • Terapia hormonal: uso de fármacos para cambiar la forma en que actúan las hormonas, o la extirpación de órganos que producen hormonas, como los ovarios.

Están en estudio la terapia biológica (uso del sistema inmunitario para combatir el cáncer), el trasplante de médula ósea, y otros tratamientos.

La mayoría de las pacientes con cáncer de mama se someten a cirugía para extraer el cáncer. Generalmente también se extraen algunos ganglios linfáticos axilares para su estudio bajo el microscopio, a fin de detectar la presencia de células cancerosas.

Terapias alternativas: bajo esta denominación se encuentran la medicina holística y otras propuestas de autoayuda que intentan que las mujeres tomen control de su situación y adquieran una posición activa frente a la enfermedad. Puede suceder que algunos/algunas médicos/médicas no tengan demasiado en cuenta el poder de la mujer o que la ubiquen impensadamente en un rol de víctima pasiva. Quizás sean éstas condiciones para que, ante la propuesta de toma de control y posición activa, las propuestas alternativas hagan su aparición. A pesar de tener un enfoque revalorizador del poder de acción y de la actitud positiva de las mujeres frente a la adversidad, se tornan criticables en la medida en que, en última instancia, culpan a las mujeres mismas de tener la enfermedad, debido a las formas de vida que llevan; le otorgan un valor mínimo al peso que tienen las condiciones del medio ambiente (en sentido amplio) que escapa a su control y finalmente, crean expectativas sobredimensionadas en la curación.

Modos de reducir los riesgos de cáncer

Cada mujer debe considerar y sopesar sus factores de riesgo personales cuando deba decidir qué hacer.

  1. Evite las terapias de reemplazo estrogénico en la menopausia, así como toda otra medicación con estrógenos. La relación entre anticonceptivos orales y el cáncer de mama sigue siendo controvertida. Algunos estudios mostraron que las mujeres que comienzan a tomar píldoras anticonceptivas a temprana edad y continuaron por un largo período, tienen un riesgo mayor de tener cáncer de mama. Otros estudios indican que tomar la píldora disminuye los riesgos del cáncer de útero y de ovarios. Para estar a salvo, las mujeres en riesgo de contraer cáncer de mama deberían evitar los anticonceptivos orales..
  2. Mantenga bajo el consumo de grasas -alrededor del 15 o 20% del total de calorías, mientras se asegura una ingesta de grasas esenciales adecuadas.
  3. Limite o elimine el alcohol.
  4. Investigaciones demostraron que la gente que tiene sobrepeso (más del 40% por encima de las "normas") tiene más cáncer y muere con mayor frecuencia, hecho que debe estar asociado con los niveles de estrógeno. También, que los altos niveles de estrógeno son un factor de precipitación del cáncer de mama. Existe en la actualidad evidencia de que el tejido graso fabrica su propio.